La Terapia Combinada
Es decir, cuando tenemos que ir al psicologo y cuando al psiquiatra. Esta ha sido una de las grandes interrogantes existentes en el mundo de los trastornos y problemas psicológicos; o bien, cuando conviene visitar ambas consultas, de manera combinada. En líneas generales, y más en lugares rurales como el nuestro, esta cuestión no la tenemos nada clara, debido a una galopante desinformación. El criterio para solicitar ayuda es sentirse mal y no encontrar o disponer de recursos personales para dar respuesta a dicho malestar. En teoría, la terapia combinada, es decir, en la que participen de manera coordinada psiquiatra y psicólogo, se reserva para trastornos consolidados, en los que los síntomas son severos y provocan interferencia en la vida de quien los padece.
Y pongo algún ejemplo: depresión mayor, crisis de pánico muy recurrente, TOC, fobias diversas, estrés descontrolado, etc. Es muy importante establecer un buen diagnóstico, para que la intervención sea acertada, tanto desde el punto de vista medicamentoso como psicológico. Si es así, no debemos temer ninguna consecuencia o efecto negativo del tratamiento; si el diagnóstico, no está claro, mejor es esperar, antes de tomar la decisión de la combinación terapéutica. El hecho de que ambos profesionales se pongan de acuerdo y trabajen con información recíproca ayudará mucho al paciente, ya que se tendrá mayor control sobre la evolución de la enfermedad y sobre el resultado final. Por tanto, y como resumen, el psiquiatra se encarga de la parte biológica del trastorno, y el psicologo, tratará mediante un trabajo a medio plazo de ir cambiando la forma de pensar y de actuar del individuo.