CRISIS DE ANSIEDAD o ataques de pánico. Es de los trastornos de ansiedad más cotidianos. Son "subidones de malestar" en los que uno teme por su integridad; suelen durar entre 7 y 10 minutos y una vez finalizado, el individuo se siente tremendamente cansado y preocupado por que le pueda repetir; es muy importante hacerle ver que no es peligroso, que no va a pasar nada, y que el mismo lo produce con predicciones catastrofistas; pero todo queda ahí; esto debe entenderlo, y después combinarlo con relajación y distracción.

ANSIEDAD SOCIAL o gran timidez. Es ansiedad o nervios a la hora de afrontar situaciones sociales cotidinas, por temor a que los demás nos vean como débiles y torpes, y podamos padecer humillaciones o quedar en ridículo. Nos aleja de conseguir objetivos normales en la vida, como tener amigos, novia, formar familia, etc. Se pasa verdaderamente mal, y por eso quien lo padece usa la evitación  como principal herramienta. Es importante que aprendamos a tener más confianza en nosotros y a no estar tan pendiente del juicio de los demás sobre nosotros. Elaboramos una jerarquia de exposición a diferentes situaciones sociales, comenzando por aquellas que nos resulten más fáciles, hasta aque vayamos sintiéndonos más seguros.

ANSIEDAD GENERALIZADA. O predominio de la preocupación en nuestros pensamientos sobre situaciones que se pueden dar en nuestra vida y sobre problemas que uno pueda tener. Idea de mundo peligroso, donde cualquier cosa puede ocurrir, sobre todo las malas. Estamos continuamente rumiando el problema o el evento a ocurrir, y no dedicamos un solo momento a buscar soluciones; nos quedamos bloqueados. ¿CÓMO SOLUCIONAR ESTO? preocupándonos lo justo, ni más ni menos. Intentar no "sobreprocuparnos" ni adelantarnos a las tragedias, ya que estaremos atrayendo a la ansiedad y no resolvemos nada; importante la actividad de cualquier tipo para restar cancha a dicha preocupación.