MODIFICACIÓN DE CONDUCTA
Evidentemente nos referimos al mundo infantil. De mayor, resulta tremendamente difícil el poder cambiar los designios de nuestra conducta. En el ámbito del niño es básico disponer de herramientas de cambio, que nos permitan ir modulando aquellas conductas de nuestro hijo que nos parezcan excesivas, inadecuadas, o sencillamente problemáticas.
Por lo tanto, hablar de MODIFICACIÓN DE CONDUCTA es hacer mención a un conjunto de técnicas procedentes de la investigación que, puestas en práctica, nos ayudan a mejorar el comportamiento de nuestro hijo, cuya base reside en los principios del aprendizaje.
¿CÓMO SABER CUANDO ESTAMOS DELANTE DE UNA CONDUCTA PROBLEMA?
Pues a través de la incidencia que ésta tenga, es decir, considerando la frecuencia, intensidad y duración de los episodios en los que se esté portando mal y nos genere una sensación de desborde, ante la cual, poco podemos hacer. Me gustaría hacer mención a la naturaleza inquieta y no intencional del niño a la hora de juzgar su comportamiento: los niños son un poco trastos y esto debemos considerarlo a la hora de aplicar medidas de control. Es niño, y hay mucha conducta que tiene que ver con su DNI.
TÉCNICAS DE MODIFICACIÓN:
1.- REFORZAMIENTO. Premiar de distinta manera cualquier intento de mejora por parte del niño. Por ejemplo, "felicitación después de una buena nota".
2.- MOLDEAMIENTO. Enseñar una conducta positiva con pequeños pasos hasta llegar a la conducta completa. Por ejemplo, "aprendizaje de la lectura".
3.- MODELADO O IMITACIÓN. Por ejemplo, "marcarle el camino para que sepa relacionarse adecuadamente".
4.- EXTINCIÓN. No hacerle caso, cuando está emitiendo una conducta reprobable. Por ejemplo, "si llama la atención a base de gritos".
5.- COSTE DE RESPUESTA. Retirarle algo que se le había concedido. Por ejemplo, "ha molestado a la hermana, nos quedamos sin ir al cine".
Estas son unas pocas, quizás las más efectivas. En último término si nos vemos sin conocimientos para contrarrestar la situación, acudir a un profesional.